20 abr 2007

En el colectivo IV

Para vos que no sabés: En Rosario hay dos maneras de pagar en el colectivo: La primera se trata de una tarjeta que tiene un número determinado de viajes, es decir, te subís, marcas al clásico estilo Sacoa y observas (al mismo estilo), la locura que aumento en tan poco tiempo. La segunda, si no compraste tarjeta, es una máquina traga monedas, por lo que hay que pagar con cambio justo. (Sí papá, esto es Argentina, ¿qué pretendes, que la caja esa haga la cuenta y te devuelva algo? espera sentado.)

Bueno, ¿a que voy con todo esto?, ¿a que va a ser?, sino a una fucking queja.

¿Por qué yo, tan normal como cualquiera (quiero creer), tengo tanta mala manteca.?
¿Por qué yo cuando tengo tarjeta y subo al bondi con ella en mano, marco y todos los demás atras mío que subían con monedas reciben el mensaje divino de Dios de que la máquina de monedas esta rota y de que pasen sin pagar? ¿Por qué?
Y lo peor de todo es cuando tengo monedas, por que ahí es cuando Dios espera que pague y me siente para luego con un rayo hacer bolsa la máquina. Y estoy seguro que ahí es cuando porrón en mano me señala y se me caga de la risa junto a San Pedro. Me juego la cabeza. (Nooo flaco, la de arriba, tan seguro no estoy..)

En fín...ya me va a tocar.

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